05. noviembre 2018
Todos tenemos el poder de elegir y nuestra realidad es el producto de nuestras elecciones. Elegimos hacer o no las cosas, incluso no elegir es una elección.
Y si lo hacemos desde nuestro saber, desde lo que realmente deseamos, creamos mucho más, porque disfrutamos de lo que estamos haciendo.
En cambio, si nuestras elecciones se fundamentan en lo que otros quieren o peor, en lo que no queremos, se creará densidad y malestar porque estaremos poniendo toda nuestra energía y atención en una